“Soy un niño terrible, que juega con los colores como una ñusta tejedora que tiñe los mantos sagrados. Soy un niño con manos pequeñas, que juega con el barro como un amauta con las estrellas que observa el destino de la vida. Soy un niño que construye y destruye y crea. Dibujo la luz, el aire y las montañas para la vida, la alegría y la felicidad de los hombres buenos”. Así se autodefine en su sitio de facebook el afamado artista autodidacta boliviano Roberto Mamani Mamani, quien, en febrero de del 2016, concluyó uno de los retos más importantes de su carrera: pintó «el mural más grande del mundo”, que mide en total 10.000 metros cuadrados.
Después de cuatro meses de arduo trabajo, Mamani Mamani finalizó el megamural del proyecto denominado «Wiphala Comunidad”, que constitió en pintar la fachada de 7 edificios, de 12 pisos cada uno, destinados a familias de bajos recursos que residen actualmente en la ciudad de El Alto (Bolivia).
La abuela, el sabio, el lloqalla, el cóndor y la Pachamama, entre otros, son algunos de los personajes plasmados por este artista, de nacimiento quechua y de sangre aymara, quien ha desarrollado su plástica a partir de la visión y sentimientos originarios de su pueblo.
Acá te dejamos en fotos y videos la obra de este vibrante hacedor que ama los colores, y también reveló que su majestuosa creación (que ya se convirtió en un gran atractivo turístico) cuenta con una capa protectora que durante 15 años resguardará el megamural de los rayos ultravioletas y las inclemencias del tiempo.
(Fotos: facebook Mamani Mamani)