Que todos vibremos bien alto

Que todos vibremos bien alto

De tanto en tanto, desde Está Bueno nos gusta impulsar algo diferente para que Olavarría luzca cada vez más hermosa y radiante. Propusimos que pintaran los puentes, que hagan bicisendas, que embellezcan las costas del arroyo, que se construyan parques para adultos mayores, que se intervengan las sendas peatonales, que se impulsen huertas urbanas, que hermoseen los separadores de las avenidas… En fin, siempre buscamos diferentes y creativas maneras de sumar buena onda. Por eso hoy tenemos una nueva propuesta bien sentida y palpitante: Que todos vibremos bien alto : )

Sí, vibrar bien alto. Lo más alto posible. Queremos que todos se animen a ir por la vida sintiéndose plenos. ¿Acaso eso es mucho pedir? A simple vista puede que no resulte sencillo de hacer, por eso te vamos a contar, de manera simple y bien didáctica, por qué es tan importante vibrar en una frecuencia más elevada, de modo que podamos trascender el miedo y hacer que la frecuencia del amor florezca. 

Elevar la frecuencia vibratoria no sólo nos ayudará a tener un mejor día, también contribuirá a que tengamos una mejor calidad de vida y que seamos más conscientes. Por eso es muy importante comprender qué implica vibrar.

Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que nada permanece inmóvil. Todo vibra, incluso las piedras. El sonido, los planetas, los sentimientos, el color, la música, la luz, los minerales, los vegetales, los pensamientos, las formas geométricas… Todo vibra en diferentes frecuencias.

El universo en el que vivimos está formado por partículas diminutas -llamadas quarks y electrones- que se comportan como ondas. A su vez, la vibración está asociada principalmente a las ondas e indica la cantidad de ciclos que produce una onda en una determinada unidad de tiempo (normalmente, un segundo). Cuando la frecuencia vibratoria es alta (como la del amor), significa que la onda vibra más rápido, y cuando la frecuencia es baja (como la del miedo), la onda vibratoria es más lenta. 

Esto es más fácil de comprender si lo graficamos : )

Ahora bien, si reemplazamos cada onda por una idea, un objeto, pensamientos, sentimientos o lo que cada uno quiera, podemos decir que quien vibra alto o tiene una frecuencia de vibración más elevada vive en un presente con mayor riqueza, porque puede percibir, sentir, experimentar o ser consciente de una mayor cantidad de cosas. De ahí que al elevar nuestra vibración, la vida se vuelva mucho más apasionante e intensa.

El miedo, así como todos los sentimientos y las emociones negativas, tiene una forma lenta de vibrar. Por eso quienes vibran bajo no pueden activar sus dones y talentos, ya que todo el potencial de nuestro ADN queda encapsulado o «dormido». ¿Se entiende ahora porqué muchos quieren que a escala global vibremos en el miedo? 

Por el contrario, quienes vibran en la frecuencia de amor, que es una frecuencia alta (con muchas ondas), florecen, «despiertan». Sólo vibrando en la frecuencia del amor tenemos una perspectiva más rica y elevada de la vida, ya que el potencial que anida en nuestro ADN se libera.

Una vez que se comprende cómo la forma de vibrar influye en nuestra manera de sentir, pensar, actuar y y percibir la realidad, es más fácil darse cuenta por qué cuando vibramos de manera negativa o densa nos sentimos «descargados». Y en cambio cuando vibramos de una manera más alta o elevada nos sentimos tan livianos, felices y frescos que parecería que fuesemos capaces de volar. (Quienes quieran conocer más sobre las investigaciones que ponen en evidencia cómo responde el ADN a las emociones pueden clickear aquí).

Cada uno es dueño de elegir cómo vibrar, porque no es lo que nos pasa sino qué hacemos con eso que nos sucede lo que marca la gran diferencia a la hora de adoptar un enfoque positivo o negativo de la vida. Podemos cantar, meditar, reír, bailar, estar más en contacto con la naturaleza, ser agradecidos, jugar con las mascotas, pasar más tiempo con los seres queridos, hacer ejercicio, alimentarnos de manera más sana, perdonar, aprender a ver las dificultades como oportunidades de aprendizaje… Podemos hacer mucho, mucho, mucho, a la hora de sumar para que, entre todos, demos vida a un presente más cristalino y humano. Por eso hoy, en Está Bueno, nuestra nueva propuesta es bien sentida y palpitante: Que todos vibremos bien alto : )

P.D.: Acá te dejamos un mensaje que nos invita a irradiar : )

Irradiemos

(Por Julio Andrés Pagano) La frecuencia de este intenso pulsar llega para rememorar que el amor es el camino en donde todo corazón alcanza su más sensible y refinada expresión, compartiendo la belleza, la pureza y la armonía de su mágico Sol interno. Es tiempo de evolucionar. Millones de seres empiezan a vibrar. Millones de soles comienzan a destellar, para que caiga el viejo y oscuro telón que da la falsa sensación de que todo está perdido. Encarnamos la luz del nuevo amanecer. Irradiemos.

Irradiar no significa luchar. Consiste en abrir bien grande el corazón para que ya no existan las fronteras. Quienes incitan a pelear olvidan que así logran perpetuar las vibraciones rastreras, pues no existe batalla que sea capaz de gestar la paz, dado que siempre alguien queda herido o resentido, y se mantiene bien viva la sed de venganza. Irradiar implica amar, sin condiciones, reconociendo en las más grandes diferencias la oportunidad para crecer a través del equilibrio.

Irradiando transmutamos. Irradiando transformamos. Irradiando juntos generamos un nuevo tipo de halo, que con su alto voltaje hará desplomar el denso telón que fue construido con la vibración del miedo. Al escucharlo caer, en dirección al Sol agradeceremos; pues ese oscuro contexto nos ayudó redescubrir que la luz también habita en el centro de nuestro pecho. Así vamos ascendiendo, así vamos comprendiendo que todo lo que existe tiene su razón de ser.

Internamente vivimos una intensa etapa de elecciones. De manera colectiva, vamos definiendo el marco en el que queremos vibrar. Por eso hay situaciones que, aunque parezcan repetirse, vienen para que tomemos nuestra más sabia decisión, oyendo la voz del corazón. ¿De nuevo le echaremos la culpa a los demás y jugaremos al pobre de mí o conscientemente plasmaremos un gran presente iluminado, en donde todos nos sintamos hermanados y logremos la Unidad?

Somos llamados a relumbrar. Cada uno tiene que liberar lo más humano, cristalino y sagrado de su esencia, para que en cada rincón de la Tierra se honre, profundamente, la existencia y volvamos a brillar. Hoy vamos a dar un nuevo paso, más allá de la razón, dejando que nuestro Sol interno refulja con infinita grandeza. Hay una amorosa vibración que ya se debe desplegar, por eso este pulsar nos vino a recordar que sigamos sumando, amando e irradiando sin cesar.

P.D.1: Elevar la vibración implica seguir la luz del corazón, que sabiamente nos guía y nos invita a disfrutar de las cosas simples y bellas de la vida: )

(Fotos Tomás Pagano)

P.D.2: Videos que ayudan a elevar la frecuencia vibratoria : )

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  1. La mejor Nota que he leido en mucho tiempo! !! Felicitaciones Julio Andres Pagano!!! Este aplauso es para vos . !

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